Por Guillermo Paz.
Fui invitado a ver el espectáculo de los Harlem Globetrotters en Córdoba por la gente de Orfeo Superdomo y realmente viéndolos vivo uno se da cuenta como es que llevan 85 años de éxito y se han instalado en la cultura popular por tantas décadas.
Es por eso que aquí resumo quince cosas por las que creo que los Harlem Globetrotters son un gran show.
1- El cuidado por el público:
El  principal postulado del artista es brindarse a su público. Creo que los  Harlem Globetrotters logran esto en gran manera. ¿Cómo? Bien, siendo un  show familiar proveniente de Estados Unidos, pero presentándose en  Córdoba, todos los jugadores y el relator hablaban en perfecto  castellano, haciendo que quienes no entienden inglés no se pierdan nada.  Ése es solamente un ejemplo. Como público me sentí muy cuidado por el  show.
2- El tiro de cuatro puntos:
Los  Harlem Globetrotters vienen haciendo lo mismo hace 85 años es una de  las críticas que reciben. Sin embargo, fue el primer equipo de  básquetbol de nivel profesional en permitir el basquet femenino cuando  en 1985 Lynette Woodard se convirtió en la primera Trotamundos. Ahora,  desde el año pasado, tomaron prestado el “Bombazo” portorriqueño y lo  incluyeron en el show teniendo cuatro círculos desde los que se pueden  efectuar tiros de cuatro puntos.
3- El árbitro es el villano:
El  referí está excedidísimo de peso y es el villano que está en contra de  los Trotamundos. Esa es la parte que, si bien se hace divertida y forma  parte del mismo show, me pegó a mí por ser árbitro de básquet.
4- La participación del público:
En  un partido de básquet común y corriente, el público alienta desde la  tribuna, trata de modificar el recorrido de un tiro libre haciendo ruido  y desconcentrando al tirador. En el caso de los partidos de los  Globetrotters el público forma parte del espectáculo, y cada cinco o  seis minutos se ve algún niño, señorita et al, entrar a la cancha a  participar.
5- Córdoba:
Ver  a los Globetrotters es un show en sí mismo, pero con jugadores como  Special K, Squirrel, Turbo, Ant Atkinson, Flight Time Lang es muy  gracioso escuchar a los cordobeses desde las tribunas tratando de llamar  la atención de alguno de los jugadores, por ejemplo Squirrel al grito  de “Eh Cuirre, Cuirre, sacate una foto Cuirre”.
6- El DT de Los Washington Generals:
Es  el otro villano, un personajón de aquéllos, con un traje fucsia y  bastón, villano de los villanos, pero siempre derrotado por los  Globetrotters.
7- Los Washington Generals:
Parecían River en la cancha de Belgrano. No agarraban una y jugaban como sin alma. Pero claro, ése es su rol.
Lo  que sí, debe ser muy desmoralizante ser un jugador de básquet,  presentarte al draft de los Generals y no quedar. Había un Ala-Pivote  rubio que tiraba más ladrillos que yo. Y más bien parecía un Ala-Pavote.
8- El target:
No  había mucho público, pero siendo un show de niños y preadolescentes y  familias, principalmente, la cantina debe haber facturado de lo lindo,  porque en el entretiempo no quedó nadie adentro sino que estaban todos  haciendo fila para comprar panchos, gaseosas y pururú.
9- La adaptación:
Así  como dije que cuidaban al público haciendo todo el show en castellano,  las canciones que elegían para bailar, o para las diferentes monerías y  sketches eran también adaptadas a música que se escucha por estos pagos  (así como también mantenían los clásicos de siempre como YMCA).
También  en un momento le hacen foul a Special K y el árbitro cobra penal y el  jugador comienza a autorelatar su penal como pateado por Messi en la  Copa América (esto fue antes de la eliminación).
10- Las fotos y autógrafos:
Ya  dije que cuidan mucho al público, lo sé, pero es de destacar también  que todo el plantel de los Globetrotters al final del partido se ponen  en diversas partes de la cancha y cada uno firma autógrafos y se saca  fotos con todas y cada una de las personas del público que así lo pidan.
11- El Score:
Nadie  mira el resultado más allá de cuando el relator lo menciona, pero al  final del tercer cuarto y antes de empezar el último cuarto, se cambio  el marcador de una diferencia de 16 puntos a una de 8 para que el final  sea “más dramático”. Aunque los Generals no le hacen partido ni a los de  Space Jam cuando están sin energía.
12- La Mascota:
Los  Globetrotters tienen dos mascotas: Globie y The Big G. Globie baila  principalmente hip hop y cosas similares, mientras que The Big G no es  la mascota más espectacular ni por asomo. Es bastante zonza dicho sea de  paso, pero cuando baila “I Get Knocked Down” de Chumbawamba alcanza y  sobra para que se gane el sueldo como mascota. Verlo clavarse de cabeza  en el suelo sin reírse es muy difícil.
13- El Alley y el Oop:
Es una de las jugadas que más consigue aplausos del público y merecidamente. Muy buenas volcadas.
14- El Rulo Loco:
Clásica  jugada de los Globetrotters en la que se la van pasando de jugador a  jugador en un vertiginoso rulo que siempre termina con una canasta en la  que los Washington Generals están desorientados (como siempre bah).
15- La silla de castigo:
Tomando  prestado del Hockey, existe la silla de castigo que implica que un  jugador que comete una falta antideportiva tiene que retirarse de la  cancha durante un minuto, dejando a su equipo con menos jugadores.
Obviamente  el árbitro, que es el villano, se cansa de echar Globetrotters, y aún  en una confusa jugada envía tres jugadores a la silla de castigo,  dejando solamente a Ant y Flight Time que hagan un rulo loco con  deslizamientos desconcertando a los Generals.
Habiendo repasado todo esto es que afirmo que el show de los Harlem Globetrotters es muy recomendable para toda la familia.
