Tenía pensado hablar de otra cosa, pero aprovechando una nota de la revista Rumbos, publicación que sale junto a La Voz del interior los domingos, voy a hablar del tiroteo web y algunas experiencias en el tema.
Hace unas semanas atrás les hablé de mis novios (y todavía me llegan comentarios sobre el tema), pero lo que no les conté es que, salvo el primero que vivía en mi ciudad, a los otros tres los conocí por internet.
Al Nº2 y a Diego por el chat de Yahoo, y a Guille por el blog.
Sumado a eso, en la historia familiar la que inició la tradición fue mi prima, que encontró a su marido on line y ahora vive en Houston y tiene dos hijas (y está en la dulce espera otra vez).
Por lo tanto, a esta altura del partido, me resulta natural saber de gente que se encuentra por la red y se enamora. Sin embargo, así como para mi es totalmente aceptable, para algunos es casi terrorífico, una de mis hermanas piensa eso, por ejemplo. Le resulta inaceptable tener una relación con alguien de quien no sepa nada. Ella prefiere enterarse por los prejuicios pueblerinos quien es quien… o al menos compra la pintura que hacen de ese quien.
Pero volviendo al eje del asunto, de por qué internet se transforma en un medio para el amor y por qué muchos encontramos pareja/s por ahí, me animo a tirar algunas hipótesis:
- Facilidad: es barato, no te exige producción y podés hacer varias cosas a la vez (ver tele, escuchar música, comer, escribir y chatear, por ejemplo).
- No existe el miedo al rechazo inicial: una cortada de rostro en persona es difícil de soportar, pero que te cierren una ventana de msn o te claven “No admitido” no es tan grave.
- Permite mostrarnos como somos/permite mentir descaradamente: mas abajo voy a enunciar los riesgos, pero creo que internet ayuda a que muchos se asuman realmente. Muchos que se muestran como hetero y en realidad son gay usan la web como espacio de “libertad”. Muchas amas de casa aburridas juegan a ser putas en los chats eróticos. Hay de todo.
También está el espacio para la mentira, a veces piadosa, a veces exagerada, a veces peligrosa. - Ayuda a que los tímidos sean menos tímidos: ya sea vía redes sociales, blog, flog o msn; los que normalmente tienen titubeos para relacionarse con personas pueden hacerlo con menos presión gracias a la pantalla.
- Ayuda a que los que tienen intereses específicos se junten: y no solamente con fines amorosos o sexuales, sino también de afinidad, de amistad, de compañerismo. Compartir el gusto por los libros, por las series, por un artísta o por coleccionar algo siempre es algo que permite lograr un lazo inmediato, que después puede seguir o no.
- Permite relaciones laborales… que pueden terminar en otra cosa: y si, esto es real. Seguramente alguno empezó cambiando mails con presupuestos de cualquier cosa y terminó invitando a salir a quien los recibía.
- Permite tener información de la persona sin que ella lo sepa: y acá es donde entramos en un punto que es un arma de doble filo. Hoy en día, y sobre todo para muchos de la generación veintipico para abajo, internet es algo natural… tan natural como que antes de salir con alguien voy a googlear su nombre a ver de qué me entero. ¡Yo yo lo he hecho!
¿Por qué digo que es un arma de doble filo? Porque pueden aparecer resultados descontextualizados y dar una imagen no muy buena de nosotros. Por ejemplo, algún posteo con mucho mal humor, alguna opinión errada que al tiempo la corregimos en otro post. Me parece que los blogs exponen demasiado al autor. Por eso yo acá escribo puras mentiras.
Sumado a eso, también estamos merced al descrédito gratuito y trollesco de cualquiera y no siempre existe la manera de hacer que eliminen ese tipo de mensajes. - Permite idealizar: y si bien esto es algo muy lindo, es el mayor riesgo.
Leer y escuchar interpretando lo que a nuestra cabecita le gustaría y no lo que en verdad se está diciendo. - Auyenta la soledad: a veces estar conectado ayuda a que nos sintamos menos solos.
Y si, ya se que no es lo mismo estar alienado frente a la compu que abrazado con alguien… pero cuando no hay un Alguien, cuando nadie “real” parece ser una compañía real… internet se muestra como algo que puede dártelo.
Me recuerda a la canción de María Elena Walsh, la Marcha de Osías. En una parte dice “Osías el osito en el bazar / todo esto y mucho más quiso comprar. / Quiero un río con catorce pescaditos / y un jardín, sin guardia y sin ladrón / también quiero para cuando este solito / un poco de conversación.”
Internet te da eso como ningún otro medio, aunque a veces los interlocutores de turno sean peores que los bots.
Y por otro lado, está lo malo; e inclusive, lo riesgoso:
- La mentira y el engaño: decir que pesás 50 kilos y en realidad son 70 es una mentira, pero no tan grave como decir que sos soltero y después salir con que estás casado y tenés 5 hijos.
- La manipulación: nadie está exento de esto, gracias a Dios nunca me pasó; pero mucha gente fue manipulada por gente que creía conocer, tener una amistad, o incluso amar. Y esto es tanto en lo económico como en lo emocional.
- Los que usan la red para actuar contra la ley: casos de tipos que han intercambiado mensajes con menores hay muchos. Por eso escribí el post con consejos para padres e hijos sobre internet.
Hoy en día el “Nene cuidado cuando cruces la calle y llevate un saquito por si refresca” no alcanza. Los padres deberían prepararse para conocer los peligros de la red y cómo explicarles a sus hijos que deben hacer y qué no en ella.
Casi todos los bloggeros alguna vez nos topamos con chicos que dejan mails e inclusive números de teléfono como si fuera algo privado que nadie ve. - Los que buscan sólo relacionarse por internet: hay vida fuera de la compu (dicen 😛 )
- Las personas con problemas psicológicos o psiquiátricos que no buscan soluciones reales: a ver, yo hice terapia varios años, así que no me estoy tirando en conta del gremio de los locos 😛 Me refiero a que mucha gente busca resolver su problema de soledad vía chat cuando en realidad tiene una depresión galopante. O cualquier otra cosa.
Si uno no está bien para recibir el amor no sirve de nada encontrarlo.
Mis consejos, para quien se aventure a la red para temas amorosos serían:
- Estar abierto a conocer gente, pero ser inteligente para el chicaneo: si uno puede manejar bien el leguaje escrito desarma a los que están haciéndose los vivos o se puede filtrar a gente que pueda ser riesgosa.
Quizás esto pueda ser más fácil para alguien con un pensamiento más analítico y que pueda ir poniendo palitos en el discurso a ver si el otro los pisa o no.
Creo que por eso nunca tuve ninguna experiencia desagradable con gente que conocí en la web; la habilidad para escribir fue lo que me salvó y me ayudó a ser más selecticva. No digo que escriba bien, pero sí que tengo habilidad para mandársela a guardar a cualquiera sin que se note. Bueno, a veces sí quiero que se note. - Esperar: a veces hay que dar un margen para conocer a la persona, más cuando San Google no nos tira ningún resultado con su nombre. Si la persona oculta su identidad o si la misma es algo dudosa, hay que tener más precauciones.
- La suerte existe, pero por las dudas no seas crédulo/a de entrada: mis tres novios sacados de internet, dicho en palabras de comadrona, son excelentes partidos.
Puedo ser una estúpida para muchas cosas, pero para elegir novio la verdad es que no. Estoy orgullosa de ellos tres (si, y lo digo como si fueran un pack de galletitas :P). De hecho nadie me cree que tan buena gente haya sido sacada de internet, en parte porque parece que la red es como un caldero de bichos y en parte porque siendo tan buenos chicos como podía ser que anduvieran soliltos por ahi.
A veces los caminos por los que uno llega a la felicidad no son los más obvios o los más tradicionales, pero no por eso son menos válidos. - No seas boludo/a: una cosa es enamorarse y otra mandarse mocos. Hay cosas que a cualquiera le resultan inceptables por puro sentido común. Si de cualquiera te parecen inaceptables pero del/la de internet no, prendé el botón de alarma, quizás algo estés por hacer mal.
Para finalizar, me gustaría dejarles el link del blog Amores en Red, una bitácora que creo el periodista Diego Levis para investigar y recopilar material para el libro que publicó sobre este tema.
Aunque el proyecto cerró hace un año, el blog es muy interesante porque recoge muchas experiencias negativas que pueden servir de alerta para personas que están metidas en relaciones que se están tornando peligrosas.
Además el autor va escribiendo el análisis que hace de los casos que le van llegando, tira datos estadísticos y publica algunos e-mails que le envían. Muy recomendable.
Por si eso fuera poco, Diego publicó una novela escrita como un intercambi de e-mails que se puede leer completa en su web personal.