A veces no son más que un hilo de plata que brilla bajando de un cerro, llamando con canto suave a los animales a beber de sus aguas. Otras veces son un torrente bullicioso que grita que vino la creciente después de la tormenta que pasó.
Los arroyitos de Córdoba, una de las cosas más lindas de nuestro paisaje.
El arroyo
Arroyito que bajas
límpido y puro
de mis montañas,
cuando cruzas el valle
por las mañanas.
El sol luce su oro
en tus cascadas
y por la noche
cuando tú cantas
entre las piedras,
la luna, plácida
entre tus ondas
deja su plata…
Arroyito serrano,
cuando tú pasas
orillando, nervioso,
riscos y plantas,
vas sembrando tu ensueño
de oro y de plata
en el encanto
de mis montañas.
Juan Carlos Soubié
Va con video de arroyo (arroio si lo dicen en cordobés) incluído.