Siguiendo con la visita al distrito de los museos de Houston, estuvimos en el Museo de la Salud, un espacio enfocado a chicos menores de 12 años que procura que conozcan detalles que hacen a la anatomía humana y a la salud.
El Museo de la Salud tiene tres áreas principales: Una muestra temporaria que va rotando, una muestra permanente de órganos de tamaño gigante denominada Amazing Body Gallery, donde además se encuentra la máquina de los ataques cardíacos, y el laboratorio DeBakey Cell Lab.
La Muestra Amazing Body Gallery:
Es una muestra para recorrer el cuerpo humano y conocer en más detalle cómo funcionan los órganos. Tiene unos 30 videos interactivos y stands de audio para aprender sobre anatomía y donde se brindan consejos de salud.
Dentro de la muestra se encuentran algunas actividades en particular muy interesantes:
– El corazón gigante, de 4 metros que muestra cómo fluye la sangre y simula además un ataque cardíaco cada 20 minutos.
En el video pueden ver el ataque. La máquina tiene además una narración en audio (en inglés) que describe el contexto en el que la persona sufre el ataque.
– El Quemador de Calorías, una actividad interactiva para que los niños hagan ejercicio y vean cuánto deben realizar para quemar las calorías de los diferentes alimentos.
– Actividades para ver cómo reacciona nuestro cuerpo al hacer ejercicios, incluyendo una rueda de hámsters gigante.
– El Cólon Colosal, un “laberinto” estilo túnel que recrea el cólon humano donde se puede recorrer por dentro. La persona que nos recibió en el museo nos contó una anécdota muy divertida al respecto: hacía un tiempo se había hecho un cogreso de especialistas del tema en la ciudad y los llevaron a los médicos al museo a conocer el laberinto. Los doctores se pusieron como locos metiéndose adentro, sacándose selfies y posando junto a la tripa gigante, mucho más emocionados que cualquier chico que haya visitado el lugar.
– Cortes de los cuerpos, para ver internamente cómo son los cuerpos; en una muestra permanente de los mismos creadores de Body Worlds.
– Proyector de los órganos: permite ver la ubicación de los órganos en el propio cuerpo. Para que el efecto se vea bien deben tener una remera lisa (o darse vuelta la que tengan, como hizo Guille para que pudiéramos sacar la foto).
El DeBakey Cell Lab:
Es una muestra permanente diseñada para educar y despertar el interés en la biología y la medicina para los más chicos. Se trata de un laboratorio que incluye siete experimentos reales para realizar por los visitantes a partir de los siete años de edad. Al ingresar nos proveyeron un guardapolvos, guantes, gafas protectoras y todo el equipamiento necesario para realizar cada experimento, que incluye actividades tanto en español como en inglés.
Cada experimento lleva entre 10 y 30 minutos de realizar, dependiendo del visitante que lo realiza. Por ello, si quieren realizar el recorrido completo de todo el museo, seguramente deban destinar una tarde completa.
Entre las cosas más curiosas de este museo está su tienda de regalos, que si tienen familiares médicos no es un lugar para desperdiciar. Y por eso acá van algunas fotos:
En la parte de peluches hay modelos de muelas, hígados (el naranja), riñores (el morado) y la cosa azul del primer plano es un testículo ¡quien hubiera dicho que iba a postear una foto en mi blog con uno de esos en la mano!
Hay un canasto de microbios de peluche donde por U$S9.99 pueden llevarse bichos de la hepatitis, gripe A, herpes, viruela, etc, etc
Y como para muestra basta un botón, este es el peluche del microbio que causa el acné
Algunas de las generalidades: Este museo es muy accesible, con una entrada de 7 dólares para niños de 3 a 11 años, y para adultos mayores de 65. Para niños menores a 2 años es gratuito, y para niños de 12 años en adelante y adultos, es de 9 dólares. Para realizar el recorrido por el DeBaker Lab Cell, hay un costo extra de 3 dólares, que vale la pena.
Otro dato interesante es que este museo está al lado del Museo de los niños, así que pueden visitarlos dos el mismo día.